El alcohol también es una droga

El alcohol ha sido ampliamente utilizado en muchas culturas a lo largo de los siglos, Colombia no es la excepción, ya que forma parte de nuestros usos y costumbres. Desafortunadamente la percepción sobre sus efectos dañinos se ha flexibilizado e, incluso, se puede apreciar que la gente no considera al alcohol como una droga o que la intoxicación constante no es algo por lo que una familia se deba alarmar. No obstante, las cifras indican lo contrario, puesto que el consumo de esta substancia está comenzando cada vez en edades más tempranas y el consumo excesivo cada vez es más frecuente; implicando un impacto significativo en la salud y el bienestar social.

¿Qué es el alcohol?

El alcohol también llamado etanol o alcohol etílico es un líquido incoloro, soluble en agua y en otros compuestos orgánicos como grasas. El etanol es el principal compuesto químico utilizado en las bebidas alcohólicas. Además del alcohol etílico existen otras dos clases de alcoholes, tales como el isopropílico y metílico, mismos que no son aptos para el consumo humano y están relacionados con el uso industrial.

¿Por qué el alcohol es una droga?

De conformidad con la Organización Mundial de la Salud (OMS), una droga se define como “toda sustancia que, introducida en el organismo por cualquier vía de administración, produce de algún modo una alteración del natural funcionamiento del sistema nervioso central del individuo y además es susceptible de crear dependencia, ya sea psicológica, física o ambas”. En este sentido, las bebidas alcohólicas entran dentro de esta categoría.

Asimismo, toda droga tiene la capacidad de generar tolerancia, misma que de conformidad a la OMS se define como “una disminución de la sensibilidad del sistema nervioso central a la sustancia”. Es decir, el cuerpo necesita cada vez dosis más altas de alcohol para conseguir los efectos que se obtenían al principio con dosis más bajas.

Bebidas alcohólicas

La característica de este tipo de bebidas es que contienen etanol (alcohol) en su composición. Básicamente existen dos tipos de bebidas alcohólicas, las fermentadas y el licor destilado. Las primeras son elaboradas a base de frutas y cereales que convierten el azúcar en alcohol por la acción de algunas substancias como las levaduras; mientras que las segundas se obtienen por medio de destilar una parte del agua que contienen las bebidas fermentadas y, de esta manera, obtener mayor graduación alcohólica.

Las bebidas fermentadas más comunes son:

• Vino: producto elaborado a partir de la fermentación de la uva. Su graduación alcohólica oscila entre los 10 y 13 grados.

• Cerveza: se obtiene del proceso de fermentación de la cebada y otros cereales, adicionalmente, por lo general se le añade las partes secas y flores de la planta lúpulo. Su graduación alcohólica oscila entre los 4 y 6 grados.

• Sidra: se obtiene a partir de la fermentación de manzanas. Su graduación alcohólica no rebasa los 5 grados.

Las bebidas destiladas más comunes son:

• Coñac o brandy: proviene de un licor destilado envejecido en barricas de roble.

• Ginebra: es el resultado de la destilación de bayas de enebro y otros cereales.

• Whisky: elaborado a partir de una mezcla de cereales (cebada, maíz y centeno).

• Ron: obtenido por destilación de caña de azúcar o melaza de remolacha fermentada.

• Vodka: se produce a partir de una variedad de cereales, normalmente centeno y patatas.

“El alcohol es una sustancia psicoactiva que en un consumo alto o crónico puede afectar de manera directa o indirecta diversos órganos del cuerpo”.

Efectos a corto plazo:

• Desinhibición.
• Euforia.
• Relajación.
• Aumento de la sociabilidad.
• Dificultad para hablar.
• Dificultad para asociar ideas.
• Descoordinación motora.
• Comportamientos sexuales riesgosos.
• Intoxicación (en el caso de un consumo excesivo de manera rápida).

Algunos posibles efectos secundarios, derivados de una intoxicación:

• Pancreatitis aguda.
• Arritmia.
• Ataque cardiaco.
• Accidente cerebrovascular.
• Atrofia muscular de las extremidades.
• Neuritis periférica.
• Daño cerebral.
• Congestión alcohólica con riesgo de muerte si no es atendida de manera emergente.

Efectos a largo plazo:

• Dependencia, es decir, que la persona constantemente tenga un consumo excesivo, no pueda dejar de beber y que su entorno social, familiar, laboral y escolar se esté viendo.

• Sangrado de estómago o esófago.

• Inflamación y daño en el páncreas.

• Cirrosis.

• Desnutrición y/o amento de variabilidad en el peso corporal.

• Cáncer: esófago, hígado y colon.

• Problemas cardiacos.

• Hipertensión.

• La mujer embarazada que bebe en exceso tiene mayor riesgo de abortos espontáneos, que su bebé presente síndrome de abstinencia al nacer, así como un hijo con problemas conductuales o algún tipo de discapacidad intelectual o motriz.

• Depresión, ansiedad, baja autoestima e incluso suicidios.

• Problemas de erección.

• Infertilidad.

• Problemas al relacionarse con los demás (divorcios, violencia doméstica, violencia callejera, pérdida de amigos o familia).

• Deserción escolar o laboral.

Radiografía del consumo de alcohol en Colombia:

De conformidad a las cifras presentadas en la Estrategia Nacional de Respuesta Integral Frente al Consumo de Alcohol en Colombia para 2013, se resalta lo siguiente:

• Aproximadamente 7 millones de personas entre los 12 y 65 años, son consumidores regulares de alcohol, es decir, el 35% de la población en el rango de estas edades.

• Aproximadamente 2.4 millones de personas entre los 12 y 65 años presentan un consumo riesgoso o perjudicial.

• La mayor proporción de las personas que presentan un consumo riesgoso o perjudicial, se encuentran en el rango de los 18 a los 24 años.

De conformidad a la Encuesta Nacional de Consumo de Substancias Psicoactivas de Colombia para 2019, se destaca que los departamentos Boyacá, Risaralda y Vaupés son los que presentan un mayor consumo de alcohol.

En ocasiones tratamos de hacer caso omiso a la adicción que se tiene al alcohol simplemente porque este es aceptado socialmente, pero debemos abrir los ojos y darnos cuenta de que esta sustancia causa daños similares que los ocasionados por cocaína, marihuana, 2cb u opioides, entre otros.

La prevención es la mejor arma en el combate de las adicciones a las drogas y al alcohol.

Referencias:

1.- Estrategia Nacional de Respuesta Integral frente al Consumo de Alcohol en Colombia. Ministerio de Salud y Protección Social y Universidad Nacional de Colombia

Microsoft Word - ESTRATEGIA NACIONAL DE ALCOHOL EN COLOMBIA WORD.docx (minsalud.gov.co)

2.- Encuesta Nacional de Consumo de Sustancias Psicoactivas, 2019.

Boletín técnico Encuesta nacional de consumo de sustancias psicoactivas (ENCSPA) 2019 (dane.gov.co)

3.- Alcohol. Infodrogas, información y prevención sobre drogas.

Alcohol (infodrogas.org)

4.- Glosario de Términos de Alcohol y Drogas. Organización Mundial de la Salud

portadilla.qxd (sld.cu)

5.- Riesgos del consumo de alcohol para la salud.

Riesgos del consumo de alcohol para la salud: MedlinePlus enciclopedia médica